Palabra que recorre el silencio de mi alma,
eco inalterable de mi pasado
locura…
Casi sin nada en las manos
sólo recuerdos que se van quedando
en el aire abandonado de cualquier rincón
del cuarto a solas,
cascada de luces multicolores
en la fuente del deseo enhiesto
a esta hora de la mañana.
Vida breve pronunciada en un solo verso
cuatro años,
capítulo del alba detrás de las hojas
caídas del árbol de la amistad y el amor.
María.
Una canción inacabada,
un instante que se queda en el vaivén continuo
de mi voz.
Musa inalterada,
cielo, mar, ola,
amor de todos los tiempos…
Eugenio
Marzo 05 del 2011